Entrevista a Hipatia de Alejandría

Por Cristina Masó Pedro. 1º Bachillerato A. IES Alto Guadiato. Peñarroya-Pueblonuevo. Curso 2019-2020


—Muy buenas, Hipatia, vamos a empezar con las preguntas: ¿dónde y cuándo naciste, según lo que se conoce?

—Nací en Alejandría, Egipto, aunque el año no se sabe con exactitud, pero fue entre 355 y 370 d.C.

 

—¿Cómo fue tu vida con tu familia?

—Realmente no se cuenta con datos sobre mi madre, pero sí es sabido que mi padre, Teón de Alejandría, era filósofo y matemático, y tuvo mucho en cuenta mi educación.

 

—¿Cómo fue esta educación? ¿La vigilaste por encima de tu salud física?

—Por supuesto que no. Procuré que mis estudios fueran impolutos, tal y como quería mi padre, pero también me dedicaba a realizar actividad física que me permitía mantener la figura y mente más saludables posible. Esto provocaba cierto contraste con las demás mujeres, que no podían tener acceso a tanta educación, y sólo se centraban en “tareas de mujeres”.

 

—Menuda diferencia. ¿Cómo fue tu vida amorosa?

—Me casé con el filósofo Isidoro, aunque me mantuve virgen toda mi vida a pesar de ciertos comentarios que recibí.

 

—Muy interesante decisión. ¿En qué te especializabas en cuanto a tus estudios?

—Fui generalmente filósofa y maestra neoplatónica griega, por lo que les enseñaba a varios discípulos en mi casa, pero también destaqué en astronomía y matemáticas.

 

—Finalmente, sabemos que pasaste, al igual que muchos otros, por una etapa difícil debido al cristianismo. ¿Qué ocurrió exactamente?

—Primero de todo, los cristianos relacionaron mis conocimientos con el paganismo, cosa que no era tan fácil en ese entonces, ya que el cristianismo estaba siendo impuesto en Alejandría. No tuve otra opción que convertirme a su religión, pero esto fue malinterpretado y visto como una conspiración contra el líder cristiano del pueblo, por lo que fui asesinada.

 

—Qué sorprendente… Pero, ¿qué era el paganismo?

—En esa religión se adoraba a dioses que, según las tres religiones monoteístas, se creían ser falsos.

 

—Muchas gracias por toda esta información. Hasta la próxima. 


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